Saltar al contenido

La ley del vacío: activa la prosperidad en ti

La ley del vacío

¿Tienes la costumbre de coleccionar objetos inútiles, creyendo que un día (sin ni siquiera saber cuándo) los necesitarás?

¿Tiene la costumbre de guardar ropa, zapatos, muebles, artículos para el hogar y otro tipo de equipo que no has usado en mucho tiempo?

¿Y dentro de ti?

¿Tienes la costumbre de albergar dolor, resentimiento, ira y miedos? A menudo, es posible que no lo veas, pero incluso un malentendido con la cajera en el mercado, o un altercado con alguien en el automóvil por el  tráfico, pueden estar acumulando pequeños rencores dentro tuyo.

No hagas eso. Es anti-prosperidad.

El flujo natural del Universo es pura armonía y abundancia. La naturaleza es siempre perfecta y próspera. Es necesario crear un espacio, «un vacío» para que entren cosas nuevas en tu vida. 

Es necesario eliminar lo inútil en ti y en tu vida, para que venga la prosperidad.

Es la fuerza de ese vacío lo que absorberá y atraerá todo lo que deseas. Mientras esté cargado material o emocionalmente con cosas viejas e inútiles, no habrá espacio abierto para nuevas  oportunidades.

Los bienes deben circular. Limpia los cajones, los armarios, el cuartito del fondo, el garaje. Da lo que ya no usas. Vende, comercia, muévete y no acumules. Haz espacio para lo nuevo.

Dentro de ti, perdona las heridas, el complejo de inferioridad, el rechazo … La actitud de guardar muchas cosas inútiles bloquea tu vida. No son los objetos almacenados los que atan tu vida, sino el significado de la actitud de guardar. Al acumular, se considera la posibilidad de falta, de que hago te hace falta. Es creer que el mañana puede faltar y que no tendrás medios para cubrir tus necesidades. Es desacreditar la abundancia y prosperidad del Universo.

Con esta postura, estás enviando dos mensajes a tu cerebro y a tu vida:

1º – ¡No confías en el mañana!
2º – Crees que lo nuevo y/o mejor no es para ti, ya que te contentas con guardar cosas viejas e inútiles.

El principio de no creer que lo mejor es para ti, puede manifestarse, por ejemplo, en la conservación de una
licuadora vieja e inútil .

Este principio, expresado en un objeto, denota un comportamiento que  también puede estar presente en otras áreas de tu vida, creando obstáculos para el éxito y la prosperidad. El simple hecho de darle a alguien la vieja licuadora, (poner el objeto en circulación), crea un vacío para que algo ocupe mejor el espacio que de ella queda.

Emocionalmente también. Llegas a creer que lo nuevo, compensará el objeto donado.

Siempre una limpieza básica, a pesar del trabajo y el cansancio que provoca, al final siempre es bienvenida e incluso la sensación de trabajo realizado ya eleva considerablemente el patrón de vibraciones.

¡Ventilar espacios, dentro y fuera de nosotros, hace un gran bien! El perdón es la limpieza del alma ¡Deja que lo nuevo entre en tu casa y dentro de  ti!

Cuando no perdonas, sientes que no hay mejor vibración para sentir e inviertes tu energía en ese sentimiento que
momentáneamente parece mantenerte vivo.

¡Pero, recuerda que lo mejor existe y es para ti AHORA